La emblemática firma Andrew Christian, fundada en 1997 en Los Ángeles, anunció que cerrará sus operaciones hacia fines de 2025, marcando el final de una era en la moda masculina LGBTQ+. Reconocida por colecciones icónicas como Trophy Boy, THICK, FUKR y Almost Naked, se convirtió en un referente global de estilo provocativo y orgullo queer
En una emotiva carta publicada en su web, Andrew Christian rememoró sus inicios en Fresno, donde pasó de soportar insultos homófobos a reinventarse a través de la costura. “La moda era mi supervivencia, cada prenda era mi coming‑out”, escribió. Resaltó el éxito del negocio —incluido su ingreso al ranking INC 500 durante cuatro años consecutivos— pero admitió que la crisis de tiendas LGBTQ y el cierre de locales aliados mermaron sus ventas
La firma no solo popularizó ropa interior y trajes de baño sensuales; redefinió cómo se viste el orgullo, visibilizó cuerpos diversos y empoderó sexualidades desafiantes. Su última colección, “Bespoke” (otoño-invierno 2025), promete ser un cierre emotivo con piezas que reflejan su historia
Aunque Andrew Christian pone punto final a una carrera de 28 años, su legado —espacios de pertenencia, autoexpresión y moda queer con orgullo— perdurará. La comunidad LGBTQ+ y la industria de la moda reconocen este cierre como un cierre simbólico, pero también una inspiración: “A los jóvenes queer con sus sueños, los veo… sus manos temblorosas darán forma al mundo”, escribió el diseñador en su carta de despedida