15 años del Matrimonio Igualitario en Argentina: una ley que hizo historia

El 15 de julio de 2010, Argentina se convertía en el primer país de América Latina en aprobar el Matrimonio Igualitario, tras una extensa lucha impulsada por activismos, organizaciones y parejas que reclamaban el derecho a amar con libertad y sin discriminación. Hoy, 15 años después, el impacto de esa ley continúa resonando en las calles, las instituciones y, sobre todo, en las vidas de miles de personas que, gracias a esa conquista, pudieron formalizar sus vínculos, crear familias y vivir con mayor dignidad.

La Ley 26.618 no solo modificó el Código Civil para permitir el casamiento entre personas del mismo sexo, sino que instaló un debate cultural profundo en la sociedad argentina, visibilizando otras formas de amar, de construir vínculos y de habitar la ciudadanía.

“No fue solo una reforma legal. Fue una victoria simbólica y política”, aseguran activistas y referentes que participaron del proceso legislativo.

Según la Federación Argentina LGBT+, desde 2010 se han celebrado más de 25.000 matrimonios igualitarios en el país. Pero el verdadero cambio va más allá de los números: se trata de una transformación social que empujó otras leyes fundamentales como la Ley de Identidad de Género, la Ley Micaela, y el reciente reconocimiento de los DNI no binarios.

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Este aniversario también invita a recordar a quienes pusieron el cuerpo y la voz en los momentos más difíciles: las familias, los activismos, los abogados, los legisladores comprometidos, y tantas personas que enfrentaron discriminación y violencia para que hoy el amor sea un derecho reconocido.

“Cuando dos personas del mismo sexo se casan, también se casa la democracia con la igualdad”,
fue una de las frases emblema de la campaña.

15 años después, la ley no es solo una norma: es un símbolo de la Argentina que queremos construir, con más inclusión, más diversidad y más respeto por los derechos de todos, todas y todes.